¿Cómo fue la respuesta gubernamental a las recomendaciones de las distintas asambleas climáticas?

Durante meses, las asambleas ciudadanas trabajan para elaborar propuestas para hacer frente a la emergencia climática. El resultado final suele ser un informe con medidas en diversos ámbitos, que se presenta ante las instituciones y la sociedad. Pero, ¿qué sucede a partir de entonces? Aunque cada asamblea nacional tiene sus características, en general hay un compromiso por parte de los gobiernos de revisar las recomendaciones y hacer una devolución al cabo de un tiempo. En este artículo vamos a conocer cómo fueron las respuestas a las propuestas de diferentes asambleas europeas.

Francia

Cuando se convocó la Convención Ciudadana por el Clima, el Presidente de la República se comprometió a que las propuestas elaboradas por la Convención fueran sometidas “sin filtro” a referéndum, voto en el Parlamento o aprobación parlamentaria directa. Sin embargo, en la práctica el proceso no fue exactamente así. En un discurso pronunciado en el Palacio del Elíseo una semana después de la sesión final, el presidente Macron se comprometió a apoyar 146 de las 149 medidas propuestas. A estas tres medidas rechazadas se le sumaron luego otras que también fueron descartadas. Por ejemplo, una de las propuestas era declarar una moratoria sobre el 5G para poder realizar antes estudios de impacto ambiental y en la salud antes de hacer las licitaciones a las empresas para el despliegue de esta tecnología en Francia.

Aun así, el proyecto de ley sobre el clima y la resiliencia adoptado por el parlamento en 2021 convirtió en ley una serie de medidas, muchas de ellas modificadas tras los cambios realizados por el gobierno en el proyecto de ley y con revisiones adicionales por parte del parlamento. La propuesta de referéndum que hizo la Convención para modificar el artículo 1 de la Constitución, para que incluyese el compromiso del Estado en la lucha contra el cambio climático, fue bloqueada por el parlamento francés. A nivel local, varias alcaldías se han comprometido a implementar las medidas propuestas por la Convención.

Para revisar la respuesta oficial del gobierno y el parlamento, se organizó una sesión adicional de la Convención en línea en febrero de 2021. En marzo de 2021 la Convención publicó su veredicto, bastante crítico, en un informe. Posteriormente, Les 150, L’Association des Citoyens de la Convention Climat, la organización que crearon las y los asambleístas, ha continuado supervisando el progreso de las medidas.

Reino Unido

La Climate Assembly United Kingdom fue puesta en marcha por seis comités parlamentarios. Tras concluir las sesiones de la Asamblea climática, el comité parlamentario de Estrategia Comercial, Energética e Industrial revisó las recomendaciones. En julio de 2021 publicó un informe, Asamblea Climática del Reino Unido: ¿Dónde estamos ahora?, en el que criticaba la falta de respuesta del gobierno a las recomendaciones de la asamblea. Por su parte, otros comités también revisaron las recomendaciones y los seis presidentes de los comités escribieron una carta al primer ministro y al líder de la oposición para instarlos a considerar las recomendaciones de la Asamblea. Aun así, las recomendaciones se integraron en el Sexto Presupuesto de Carbono del Comité de Cambio Climático. 

Irlanda

En Irlanda se constituyó una asamblea ciudadana para debatir sobre diversos aspectos entre 2016 y 2018. En 2017 varias sesiones se dedicaron a abordar el cambio climático, que concluyeron en la emisión de un informe. Posteriormente se creó un comité de cambio climático, el Joint Oireachtas Committee on Climate Action, que repasó durante varios meses las propuestas de la asamblea. El fruto de este trabajo fue un segundo informe que profundizaba en cada medida y detallaba cómo se podría llevar a cabo. El comité en general apoyó las recomendaciones de la Asamblea de Ciudadanos, con la excepción de su propuesta de introducir un impuesto sobre las emisiones de gases de efecto invernadero de la agricultura. El informe del comité influyó en gran medida en el Plan de Acción Climática intergubernamental publicado en junio de 2019 y el posterior Proyecto de Ley de Acción Climática 2020.

Escocia

La asamblea climática escocesa se reunió de noviembre de 2020 a marzo de 2021. Ese mismo año, en diciembre, el gobierno escocés publicó una respuesta a las recomendaciones. En ella el gobierno declaraba que la asamblea había tenido un “profundo impacto” en su labor, dándole un mandato para actuar. Además, el gobierno explicaba qué recomendaciones apoyaba, cuáles apoyaba parcialmente, etc., aunque sin especificar un calendario u objetivos concretos. Esta devolución dio pie a una nueva sesión de la asamblea en febrero de 2022, para revisar la respuesta del gobierno a sus recomendaciones, que concluyó con otro documento, la Declaración de respuesta.